martes, 29 de mayo de 2007

Reseña sin Fotos

2 | 26 de m a r zo de 2006 | Revista Domingo | w w w.endi.com www.endi.com | Revista Domingo | 26 de m a r zo de 2006 | 3

CARTA DE LOS EDITORES
Un proyecto de futuro
Hoy les presentamos la primera de dos ediciones especiales de la Revista Domingo dedicadas al proyecto de rehabilitación del Caño Martín Peña. Es la primera vez que nuestra publicación dedica dos ediciones íntegras y consecutivas a un mismo tema. Y no es para menos.
Se trata, en efecto, de una de las obras sociales de mayor magnitud en la historia contemporánea de Puerto Rico.
Organizados bajo la Corporación del Proyecto Enlace, los sectores público, privado y
comunitario se han unido para atender las condiciones de pobreza y marginalidad, y de
degradación del entorno, que afectan a ocho comunidades situadas en los márgenes del
Caño -Barrio Obrero (Oeste y San Ciprián),Barrio Obrero-Marina, Buena Vista-Santurce,
Península de Cantera, Parada 27, Las Monjas, Buena Vista-Hato Rey e Israel-Bitumul. Comunidades que han vivido marginadas del resto de la
ciudad de San Juan por décadas, y que el Proyecto Enlace busca rehabilitar, de una manera integral, para que losresidentes del sector pasen a ser los protagonistas de su propio desarrollo. Se trata, en otras palabras, de un inmenso ejercicio de apoderamiento y participación ciudadana. La planificación y uso de terrenos es un asunto de urgente actualidad. Este mes ha habido no menos de tres foros en los que se ha discutido el tema: las vistas legislativas Mangle, amor,
basura y vida.


Por Mimi Ortiz Martin . Fotos por Doel Vázquez
EN EL FONDO DEL CAÑO…
“El agua del Caño corre lenta, porque le pesa la mierda que arrastra. Antes
era limpia, me metía ahí a bañarme, a pescar. Vivía de la pesca. Cuidado, que
no te hundas y te cortes, porque el agua está ahí debajo de toda esa basura.
Sigue viva”. -Calienta el crack eñangotao entre basura, neveras, matres,
zinc, plástico, plástico, plástico…- “Esto se jorobó cuando todos nos
cansamos de esperar. Y nadie venía a recoger la basura ni a arreglar las
alcantarillas. Nos dieron la espalda, coño, y nos prometían y nos daban la
espalda. Y volvían a prometernos”.

EDICIÓN ESPECIAL I

Caño Martín Peña
Un residente del sector cruza el Caño Martín Peña, cubierto por
basura y pedazos de madera que comenzaron hace apenas dos días, el programa de
conferencias del Urban Land Institute este próximo jueves
y la Cumbre Social efectuada en la Universidad del
Sagrado Corazón a principios de marzo.
Para estas ediciones especiales de Revista Domingo, la
segunda de las cuales publicará el próximo 2 de abril,
contamos con el extraordinario trabajo fotográfico
de Doel Vázquez. Este veterano del
lente, de fina sensibilidad humana, se entregó
en cuerpo y alma, durante 10 meses, a la labor
de documentar en imágenes el diario acontecer
de la vida en el Caño. Cada una de sus
fotografías cuenta elocuentemente una historia.
Contamos además con el apoyo del
equipo completo de Revistas Dominicales, así
como con la colaboración del reportero José
Javier Pérez, conocedor amplio de los temas
ambientales, cuyo artículo aparece en la próxima edición.
Agradecemos también al doctor Aníbal Sepúlveda y al
arquitecto Emilio Martínez, quienes proveyeron las fotografías
históricas.
Esperamos que estas ediciones les sirvan para conocer
algo de ese Puerto Rico que la mayoría desconoce, y de los
frutos que pueden alcanzarse cuando existe unidad de
propósitos. El Proyecto Enlace es digno de todo nuestro
apoyo, y de ser emulado en otras zonas y comunidades del
país. Es nuestro futuro.
Loren Ferré Rangel
Subdirectora a cargo de Revistas
Rafael Vega Curry
Editor de Revistas Dominicales
www.endi.com
Vea más sobre el
Caño Martín Peña
• Fotogalería
• Mapa
• Vídeos
El blog no me deja postear la reseña que esta en acrobat.

Reseña Caño Martín Peña

Hola a todos:

Intente conseguir un o una Planificad@r pero mi esfuerzo fue infructuoso. Fui a la Escuela Graduada de Planificación en la UPR pero los profesores están en receso académico. De ahí me fui a la Junta de Planificación en la Torre Minilla en Santurce. Allí hay una pequeña biblioteca y me dieron información del Caño Martín Peña.

Entre la información que me ofrecieron encontré un estudio bien abarcador sobre la situación del Caño. De hecho Félix aparece como uno de los consultores del proyecto. Yo le pregunte al bibliotecario se era posible adquirir ese documento y me dijo que no sabia. En fin, buscando entre los documentos me tope con una reseña del periódico El Nuevo Día. La misma tiene un compendio del proyecto que se esta realizando en el área así como fotos y entrevistas con residentes. Decidí visitar directamente la biblioteca del periódico y conseguí las dos ediciones de la reseña. Me las dieron en digital y lo voy a postear en el blog.

Me resulto curioso ver como estas personas están haciendo arte sin saberlo. Están utilizando la interdiciplina y la teoría de sistemas para resolver el complejo problema. Una resiente comenta que en un momento cada cual pensaba en su sector como una problemática separada pero se dio cuenta que son parte de un sistema mas amplio y complejo que incluye las 8 comunidades aledañas al Caño.

Seria interesante que alguien como la Profesora les hicira conciencia de lo que estan haciendo. Digo la Profesora porque tiene la habilidad de enlazar cosas que aparentan ser paralelas. Algo yo creo que necesitan todas estas personas es el arte oblicuo. Porque el proyecto es monumental y son muchos flancos los que hay que defender. La burocracia, los intereses económicos, la ignorancia, la falta de voluntad. Es imposible hacerle frente a esa mole, hay que buscar la forma de entrar por la cocina.

Al final me surge una idea alocada pero creo que el arte es la respuesta.

viernes, 18 de mayo de 2007

Revista Domingo

Paraíso degradado

Domingo, 2 de Abril de 2006

Por Ileana Delgado Castro
idelgado@elnuevodia.com

Hubo una época en que la ribera sur de la Laguna San José se utilizaba como una especie de balneario donde los puertorriqueños acudían para disfrutar de baños de agua salobre. Y el Caño Martín Peña, que conectaba la laguna con la Bahía de San Juan, era el lugar perfecto para un día de pesca. O, simplemente, para pasear y admirar la rica vida silvestre -rodeado de icacos, manglares y con gran abundancia de peces.

Ése es el recuerdo que tienen algunos, antes de que se comenzaran a rellenar humedales en las márgenes del Caño -a partir de la década de 1920-, cuando miles de familias campesinas comenzaron a emigrar hacia San Juan en busca de nuevas oportunidades.

Y el hermoso paraíso natural se fue convirtiendo, a lo largo de los años, en “un gran pozo séptico”, señala Félix Aponte, profesor de la Escuela Graduada de Planificación de la Universidad de Puerto Rico que ha investigado la situación de salud pública y ambiental de toda la zona.

Esas condiciones que se dan alrededor del Caño Martín Peña -de contaminación y degradación del ambiente- afectan directamente la salud de los cerca de 30,000 residentes de todas las comunidades que lo rodean. Desde Barrio Obrero (Oeste y San Ciprián), Barrio Obrero-Marina, Buena Vista-Santurce, Penísula de Cantera, Parada 27, Las Monjas y Buena Vista-Hato Rey, hasta la barriada de Israel-Bitumul.

“Lo que queda de lo que fue el cauce del Caño está seriamente contaminado con bacterias de origen fecal. Y la presencia de esas bacterias, aunque no necesariamente causen condiciones de salud, es el indicador ambiental de otros patógenos”, señala Aponte, al exponer su preocupación por el suplido de agua potable que discurre por tuberías que están sobre o inmediatamente debajo del suelo “saturado de esas aguas cuya calidad está comprometida”.

“En la medida en que las tuberías del sistema de distribución de agua potable no tengan, por un lado, la condición física y estructural para estar aisladas y, por el otro, la presión suficiente como para poder prevenir la entrada de agua contaminada, el peligro está latente”, explica Aponte.

De hecho, según el investigador hay una troncal de agua potable que pasa debajo del lecho del Caño y que también les da servicio a ciertas porciones de Santurce. Esas tuberías, sostiene Aponte, que son muy viejas y discurren por un medio que está contaminado, no han tenido mantenimiento preventivo y están en muy malas condiciones. “No estamos diciendo que el agua esté contaminada. Pero, ciertamente, está en un ambiente que, potencialmente, se puede contaminar”.

Con las aguas sanitarias, el problema es aún más complicado, enfatiza Aponte, especialmente para la gente que vive más cerca al Caño. “Cada vez que se produce un evento de lluvia significativo, el nivel del agua sube y llega hasta las casas. Así que los residentes entran en contacto con estas aguas usadas. A esto se añade que hay muchos residuos sólidos que ganan acceso al Caño, ya sea porque los mismos vecinos tiran desperdicios allí o por personas de otras regiones que, al saber que el área está degradada, llevan su basura allí”, indica Aponte.

Ambiente insalubre

“Hay basura por todos lados, excrementos, chatarra...”, afirma la Dra. Patricia Cano, directora del programa de Higienización del Ambiente Físico Inmediato (HAFI), del Departamento de Salud. Es un panorama desolador, añade la salubrista, quien destaca que son condiciones sanitarias extremas, donde permea el mal olor, ratas que “parecen conejos”, aguas negras, sabandijas, mosquitos y cucarachas -las condiciones ideales para epidemias, brotes e infecciones.

“Los niños juegan en ese ambiente contaminado y están expuestos a todo eso. Y algunas personas padecen de problemas respiratorios que no sabemos a largo plazo en qué van a desencadenar”, dice la Dra. Cano.

Ése es el diario vivir de Yasiris Lebrón, una madre de 44 años con tres hijas -de 16, 20 y 22 años-, que vive en Barrio Obrero “de la 13 abajo”. Según cuenta, dos de sus hijas son asmáticas y ella se lo achaca al ambiente de basura y escombros que las rodea.

“Cuando llueve, las alcantarillas se desbordan y la peste y los mosquitos son insoportables”, dice Lebrón, pero alega que la mayor parte de la basura que hay por los alrededores es de personas que no son de la comunidad, que llegan allí “con camiones llenos”.

“Antes venían todos los meses a fumigar y eso ayudaba a eliminar las sabandijas. Pero hace tiempo que no vienen”, agrega Lebrón, quien dice estar “loca por salir” y espera porque se terminen los trámites de reubicación.

Otro problema relacionado con la basura es que hay muchas áreas adonde es imposible llegar con el servicio de recogido de basura, lo que obliga a sus residentes a botarla en su ambiente inmediato.

“La Autoridad de Desperdicios Sólidos no puede entrar con sus camiones porque las calles son muy estrechas y no tienen acceso”, dice la Dra. Cano, aunque destaca que hay unos zafacones ubicados en áreas donde los camiones sí pueden llegar. Lo que pasa, agrega, es que se trata de un problema crónico y “son hábitos muy difíciles de eliminar”.

El otro problema de salud pública, destaca Aponte, tiene que ver con la salud emocional y mental que, a su vez, se expresa en una alta incidencia de dependencia de drogas y alcohol. Además de que tampoco se menciona o se estudia “una gran población de indocumentados” que varía, pero que también tiene los mismos problemas de salud y ambientales.

“Ciertamente, como pasa con el resto de la sociedad puertorriqueña, es un área de preocupación porque es un problema fundamentalmente de salud pública. Lo vemos por el lado social de la criminalidad, pero la realidad es que hay muchos jóvenes que tienen dependencia a las drogas y al alcohol o están expuestos a estos problemas. Además de otros factores asociados, como prostitución, VIH, etc.”, agrega Aponte.

De hecho, la drogadicción, la deserción escolar y el embarazo en adolescentes son problemas con los que se tiene que trabajar en estas comunidades, afirma el Dr. Pedro Zayas, médico de familia que por más de 20 años ha tenido su consulta -Centro Médico Familiar del Barrio- en el área de Barrio Obrero.

“El problema es que hay muchachos de 12 y 13 años que ya están metidos en la droga. Ven a los tiradores de droga con dinero y buenos carros, y ésos son sus ídolos”, agrega el Dr. Zayas, pero destaca que los problemas de salud en el área son “más o menos los mismos que los del resto de Puerto Rico”.

“Las enfermedades de aquí son las normales. Por ejemplo, como los niños van a las mismas escuelas, cuando hay un brote de diarrea o de conjuntivitis, todos se afectan”, afirma el Dr. Zayas, aunque está de acuerdo en que hay comunidades -las más cercanas al Caño- donde hay mucha contaminación. Por eso es que, por épocas, hay muchos problemas de la piel, al igual que son comunes los catarros y las infecciones.



Remedios que no sanan

“Uno no percibe que se ha hecho suficiente. El gobierno municipal tiene su clínica y el Departamento de Salud hace lo que puede. Pero visto en conjunto no parece mucho”, dice Aponte, respecto a lo que se ha estado haciendo en las comunidades del Caño. Sobre todo, porque la asistencia que se da es remediativa, mientras que en la parte ambiental se ha hecho muy poco. “Por eso acostumbramos a decir que el país le ha dado la espalda a esta zona”.

“Hay un recuerdo de ellos cuando los políticos se acuerdan de que son electores. Van allá y prometen. Pero en términos de sociedad, de entender y atender estos problemas, hasta el Proyecto Enlace, no había una respuesta gubernamental estructurada”, dice Aponte.

Pero hace falta que el Departamento de Salud haga un estudio epidemiológico “para establecer las condiciones -tanto ambientales como sociales- que permitan hacer una intervención salubrista”, destaca Aponte.

Por eso es tan importante la participación ciudadana en todo este proceso, indica la Dra. Cano. “Yo puedo llegar y limpiar, pero si siguen botando basura de qué sirve. Hay que entrar a la comunidad y ayudarlos a erradicar esos hábitos, además de buscar la forma de que tengan un recogido de basura efectivo”. De hecho, indica que en HAFI tienen un compromiso con las comunidades especiales para ofrecerles apoyo técnico, educativo y tratamiento químico a vectores de importancia que afecten la salud pública.

“La comunidad no nos puede ver como los únicos que podemos solucionarles sus problemas de salud pública. También deben entender que cuando la comunidad participa activamente, se va a traducir en una mejor salud, tanto humana como ambiental”, afirma la Dra. Cano, a la vez que enfatiza en que se promueva la participación social para desarrollar una cultura de prevención que fortalezca la autogestión en la comunidades.

El Nuevo Día

Trabajo Final

Como ya saben mi rabajo final sera en el site. Para mi es una experiencia extraña porque estoy haciendo algo en direccion opuesta. Es la clase de desnudes que me hablaba la profesora. Poner en relieve todo aquello que no neceariamente me enorgullece. Al principio tenia una fijacion en pintar algo, porque es lo que dominino bien. Pero creo que la pintura no es el medio adecuado en este proyecto. Todo lo que necesito esta alli y voy a buscar la forma de resaltar esa realidad sin alterarla.

No se cuan dispuestos estan a acompañarme al lugar pero para mi es sumamente importante que hagan el esfurerzo. Voy a tratar de conseguir una Van de pasajeros para que vayamos juntos. Quisiera hacer un tour desde San Juan hasta Las Monjas por la ruta panoramica del verdadero Puerto Rico. Se veran los contrastes de comunidades en un mismo espacio. Como parte del performance tratare de conseguir un urbanista que nos lleve al contexto del lugar.

Dependiendo la hora que escojamos tendremos la oportunidad de degustar las mejores alcapurrias y Hamberger Homemade del mundo. Les aseguro que ustedes no han probado esa delicia. El lugar abre a eso de las 7:30pm no se si a esa hora todavia estemos alli. Aunque no lo crean ese seria mi cierre porque ese lugar y sabor es uno de los recuerdos mas fuertes y placenteros de mi infancia. Hasta podemos pedirlo para llevar.

P.D Claro los que tengan problemas de colesterol no podran someterse al cierre de mi obra... ja, ja, ja...

miércoles, 9 de mayo de 2007

Mas fotos

Continuacion de propuesta.

Como ya habia mencionado la idea inicial era explorar el tema de la paternidad. Eso me llevo a visitar el lugar donde yo nací. Ahi esta la evidencia de como a sido el proceso de mi vida, mis complejos y mis virtudes. El "leitmotif" que percibi fue lo inconcluso ya que se refleja en la casa en el patio y en todo el vecindario. El contraste del desarrollo y el poder económico coincidiendo en el mismo lugar.

Mi proyecto consiste en hacer una instalación que coloque en relieve la fragilidad de la barraiada vs el poder ecomomico compartiendo un mismo espacio. La instalacion es una especie de autorretrato. Utilizare materiales del lugar para hacer una representacion de lo que se sentia estar en la casa fragil casi que al interperie. Dentro de esa estructura inconclusa colocare una pintura que de alguna forma retrate mi realidad actual. Estoy incluyendo el pasado, mis complejos, el presente, el futuro. Por otro lado me interesa investigar como se formó esa comunidad y si de alguna forma esa expresion de la "arquitectura del barrio" es intrinseco a la forma de pensar y de vivir de las personas.

Tengo que conseguir un Planificador que tenga alguna data sobre lo que ocurrió en la zona.

miércoles, 2 de mayo de 2007

En el Site


Visité el lugar. Fotografié objetos, estructuras y todo aquello que pude reconocer. También hable con mi tía loca que me encanta. Es la persona mas genuina que conozco.

Como habia mencionado quiero desarrollar el tema de lo inconcluso. De repente me fije que no tn solo es un elemento que se repite en mi casa sino en el patio, en la calle, en el barrio y por todas partes.